¡Qué tal Fridas Enamoradas!
¿Tú y tu pareja aún no saben en dónde celebrar su boda?
Sin duda, una parte importante al momento de planear una boda es decidir en donde celebrarla. Nos quebramos la mente tratando de elegir una fecha en la ese lugar tan popular por fin esté desocupado o tratando de decidirnos por qué lugar es el más original de los recurridos que hay en nuestra zona.
Tener una boda destino puede ser la gran solución a ese gran problema. ¿Por qué limitarse si el mundo entero es nuestra opción? Y por eso hoy te presentamos las 10 mejores ventajas de hacer una boda destino, que seguro te convencerán de preparar las maletas y empezar la aventura.
1. Tendrás una boda única entre todas.
Menos del 25% de las parejas que se casan hoy en día tienen bodas destino, así que seguramente ya has visitado los lugares frecuentes para celebrar una boda en la ciudad en donde vives.
Teniendo una boda destino podrás tener una boda única y en un lugar diferente, lo cual siempre es mucho más atractivo. Definitivamente no es lo mismo casarse en el popular salón de eventos de tu ciudad a casarse en una playa paradisíaca, en una hacienda en ruinas o tal vez en medio del bosque o entre montañas. ¡Tienes el mundo entero para explorar!
2. No sufrirás tanto estrés.
Las bodas destino suelen ser mucho más simples y sencillas de organizar por esta siguiente razón:
Existen cruceros y hoteles resort que ofrecen paquetes completos para bodas, ya sean para 10 o 200 invitados. Incluyendo banquete, decoración, pastel y hasta wedding planner. Tú sólo tienes que bajarte del avión y firmar los papeles, ellos se encargarán del resto.
Si no tienes pensado casarte en un resort, de igual forma puedes contratar a un wedding planner que se especialice en bodas destino, ellos conocen el área a la perfección y tienen toda la experiencia al respecto; así tú te libras del estrés de planear una fiesta.
3. Tendrás solamente a los invitados más especiales.
Una boda tradicional suele tener un promedio de 200 invitados, cuando en una boda destino el promedio de invitados suele ser alrededor de 30 a 50 personas. Esto se debe a que no cualquiera estará dispuesto de tomarse el tiempo e invertir en hacer un viaje, hospedarse en un hotel y tal vez faltar un par de días al trabajo para asistir a una boda.
Así que tú y tu pareja podrán estar seguros de que cada invitado que los acompañe ese día será verdaderamente allegado a ustedes, las personas especiales siempre estarán a tu lado. Podrás quitarte la presión de invitar a todos esos primos terceros y compañeros de trabajo a los que sólo invitarías por mero compromiso.
4. Te ahorrarás dinero.
Sí, ¡has leído bien! Debido a que tendrás muchos menos invitados a los que suelen haber en una boda tradicional, tu presupuesto también podrá bajar mucho más.
La mayoría de los hoteles suelen ofrecer precios especiales para grupos y como mencionamos anteriormente, ofrecen paquetes para bodas con todo incluido con los que te ahorrarás muchísimo.
También puedes aprovechar de viajar en temporada baja cuando los boletos de avión son mucho más baratos. Varios hoteles bajan sus tarifas en periodos no vacacionales, sobre todo si es entre semana. ¿Qué más da casarse en miércoles si estás en un lugar paradisíaco?
5. Pasarás tiempo de calidad con tus invitados.
En una boda tradicional uno suele estar de prisa organizando cada detalle y el día de la fiesta sólo tienes unas cuantas horas para poder convivir un poco con cada uno de tus invitados, en cambio, en una boda destino sueles tener de dos a tres días para poder convivir con todos ellos, en calma y en un ambiente sin presiones. ¿Qué tan seguido sueles tener la oportunidad para pasar un buen tiempo de calidad con esos amigos y familiares tan añorados?
6. Tendrás las fotografías más épicas.
De igual forma, al salir de su ciudad, tú y tu pareja tendrán lo oportunidad de ver nuevos rincones y de hacerlos el escenario perfecto para sus fotografías de boda. Pueden aprovechar e ir desde un par de días antes para explorar el área y escoger sus rincones favoritos, la imaginación es su límite. ¿Quién no quisiera tener fotos en la cima de una montaña, a la orilla de la playa o entre los rincones de esa pintoresca ciudad que tanto deseabas visitar?
7. Saldrás de la rutina.
Tú y tus invitados pueden matar dos pájaros de un tiro y aprovechar de hacer unas pequeñas vacaciones, cuando uno visita lugares únicos no sólo quiere ir a una boda y ya. No sólo ustedes, también sus invitados podrán explorar el lugar, conocer sus rincones y su cultura; al hacer el viaje todos querrán aprovechar de quedarse unos días y darse un descanso del bullicio del día a día.
8. Puedes empezar tu luna de miel con más tiempo.
Al llegar a su destino es seguro que tú y tu pareja entrarán a un estado relajado y lejos de la rutina, del que podrán disfrutar durante toda la víspera de su boda. Varios hoteles ofrecen paquetes especiales para recién casados y hasta quizá puedan aprovechar para extender su estadía y tener una mini luna de miel por un precio especial, ya después de que sus invitados regresen a su ciudad de origen.
De no querer quedarse, pueden aprovechar de elegir un destino al que sea mucho más fácil y barato acceder desde ahí que desde su lugar de origen, de esta manera también ahorrarán en su viaje.
9. Vivirás y probarás cosas diferentes.
Visitando lugares nuevos conocerás nueva gente y nuevas culturas, quizás tú y tu pareja se atrevan a tener una celebración fuera de lo común y hacer que un chamán los case en una ceremonia maya en Cancún.
Además, al visitar ese lugar al que siempre quisiste ir no sólo te sumergirás de su cultura, también te llenarás de su rica comida. Ya es hora de salir del mismo pollo y ensalada tan típico de las bodas y atrevámonos a probar cosas diferentes, al fin podrás aprovechar de probar esos platillos típicos de la región con los que siempre soñaste con probar.
10. Visitarás el lugar de tus sueños.
¿Límites? ¡No existen! Mientras se pueda comprar un boleto de avión a ese lugar todo es posible. ¿Te imaginas? Por fin podrás visitar ese lugar que tanto soñaste con visitar y además vivirás uno de los mejores días de tu vida, sin duda una experiencia inigualable que jamás olvidarás.
Seguro que después de eso, ese destino siempre tendrá un lugar especial en tu corazón y en tu memoria, será un lugar al que tú y tu pareja querrán llevar a sus hijos en un futuro y platicarles la gran aventura que vivieron aquellos días de ensueño ahí.
¿Y ahora qué esperan? ¡Tomen sus maletas y cásense lejos!