¡Hola Fridas Enamoradas!
Su boda es uno de los días más importantes de sus vidas y en este tiempo y era ya no es necesario hacer una boda de la misma manera en la que sus padres la tuvieron o como siempre las hemos visto en las películas.
No hay que ponerse tan estrictos y ser tan duros con ustedes mismos para esforzarse a seguir una serie de reglas que tal vez no vaya muy de acuerdo a sus ideologías o incluso con sus personalidades. Recuerden siempre que se trata de su día y las reglas las ponen ustedes, nadie más.
Por eso hoy les traemos 12 tradiciones de boda que hay que atrevernos a romper y por las cuáles no hay que sentirse culpables si se deciden no seguir.
1. El gran vestido blanco
Nuestra regla favorita a romper. No nos cansaremos de decirles a las novias que se atrevan a ser ellas mismas y que estén seguras de que si lo suyo no es el tradicional gran vestido blanco, entonces no lo usen, tan simple como eso. Puedes usar algo mucho más sencillo o de otro color; sé tú misma, esa es la única regla.
2. El típico ramo redondo
El sólo usar rosas puede funcionar para algunas novias, pero creemos que al ver todas las maravillosas flores que la naturaleza nos ofrece entonces podrás abrir tu panorama. Las tendencias han cambiado y el tradicional ramo en forma de esfera ya tuvo su momento, ahora las formas y caídas naturales de las flores son lo que harán que tu look luzca aún más.
3. Esa obsesión por cumplir todos los estereotipos
Algo viejo, algo nuevo, algo azul. ¡Basta! Relájate, no pasa nada si no los tienes todos. Quizá sea una forma simbólica de darle significado a elementos que usaremos ese día, pero no te estreses porque no encuentras aquel alfiler azul que te regaló tu abuelita.
No bases tu día en supersticiones, el matrimonio se basa en el amor y el esfuerzo que tú y tu pareja inviertan en él; lo demás sale sobrando.
4. Sólo amigas con la novia y sólo amigos con el novio en la corte nupcial
Si bien tus damas de boda suelen ser tus amigas más cercanas, también habrá ocasiones en que tendrás amigos igual de allegados y que quisieras que estén de tu lado en ese momento especial. ¿Por qué limitarse? Estamos en tiempos muy modernos en el que el sexo de tus amistades o familiares no debería de ser condicional para considerarlos parte de tu compañía especial en ese día.
5. Contener tus emociones para no arruinar el maquillaje
¡Paren de decirle a la novia que no llore! Es un día en el que sus emociones están a flor de piel, así que déjenla sentir todo lo que ella quiera sentir y si eso implica llorar antes de la ceremonia, es totalmente válido; también hay lágrimas de felicidad y hay que dejarlas fluir. Las fotos que pueden capturarse llenas de esa emoción son indescriptibles, el maquillaje siempre se puede arreglar.
6. Larga lista de invitados
¿De verdad te nace invitar a toda esa gente? Si es así hazlo, pero ni tú ni tu pareja tienen porqué sentirse comprometidos de invitar a gente que no tiene ninguna importancia sentimental en su día. Es un día para disfrutar y compartir con la gente más importante para ustedes, no se preocupen por hacer compromisos sociales en un día que no debería de tener presión alguna.
7. Las familias se sientan de lados separados
También es algo que ya no debería de tener importancia alguna. ¿Para qué establecer un lado de novio y otro de novia? Lo que se busca más que nada en ese día es la unión, todos ahora forman parte de una gran familia y hay que celebrarlo.
8. La pareja no debe verse antes de la ceremonia
Entendemos que el factor sorpresa de verse los dos por primera vez es indescriptible, ¿pero por qué no hacerlo a solas antes de toda la presión? El que ustedes tengan un momento íntimo, lejos de la gente y en el que puedan compartir un instante a solas, el cual difícilmente podrán tener después, es de lo más especial. Además que tener un first look no se compara con nada, pueden aprovechar para tener un momento íntimo o darse un detalle antes de caminar al altar.
9. Caminar al altar junto a tu padre y nada más
Sin duda es un momento que llega a ser muy lindo cuando la situación se presta, pero que no es el escenario ideal para todas las novias.
No tiene que ser necesariamente tu papá quien te acompañe, puede ser tu madre, ambos padres o alguien que tú consideres lo necesariamente importante para hacerlo. Incluso la pareja puede entrar junta y recorrer el camino los dos desde el principio, o si esto es algo que ambos quieren evitar, entonces los dos pueden esperar juntos en el altar a que sus invitados lleguen a su lugar. Las reglas las ponen ustedes.
10. Todas las damas deben de vestir el mismo vestido costoso
El motivo principal de tener damas en tu boda es el de tener a la compañía perfecta que te apoye en los momentos en que más lo necesitas. ¿Pero por qué hacerlas pagar dinero innecesario en un vestido que no les gusta?
Confía en ellas y deja que elijan el vestido que cada una prefiera, el tener damas uniformadas ya pasó de moda y crear un look chic en el que cada una vista a su estilo y que combinen sin esfuerzo entre sí, es lo de hoy.
11. La típica cena con un solo platillo que no a todos les gusta
Estamos acostumbrados a que en los eventos formales la comida no sea tan buena o a que sea un platillo tan insignificante que ni siquiera sacia tu hambre. Si es una buena fiesta, tiene que haber buena comida. No se limiten a tener el típico platillo de todas las bodas, pueden ofrecer un banquete tipo buffete en el que cada invitado decide qué se va a servir o incluso contratar su food truck favorito, no tiene que ser algo demasiado elegante si no lo quieren así.
12. Los recién casados tienen que sentarse solos en un lugar exclusivo
La noche es corta y tal vez tú y tu pareja no quieren pasarla sentados toda la noche lejos de todos. Es un día para disfrutar y convivir con los más allegados, así que, ¿por qué no sentarse entre todos los invitados y cenar a su lado? Es un momento que se pasará más rápido de lo que crees, así que deben de aprovechar cada instante para crear memorias nuevas que seguro atesorarán al recordar en un futuro.
Recuerda, el romper tradiciones no es un acto de rebeldía, pero sí una manera de decirle al mundo que no hay ninguna manera correcta de tener una boda. La forma en la que ustedes la sientan es la manera en la que las cosas tienen que salir, sean ustedes mismos y no se limiten por miedo al qué dirán, vivan su día tal y como ustedes siempre lo soñaron. ¡Hasta la próxima! xoxo